lunes, 22 de marzo de 2010

El caos que me mata.

El descontrol se apodera de mí estos días; no hay mayor caos que el de mi mente, no existe mayor temor que el de que mis propios temores me venzan.
Me quedo atrapada en un hilo de esa telaraña y no puedo avanzar, caigo una vez, caigo dos... necesito esa mano que me salve y me libere de mí misma. Y vuelvo a pagar toda mi furia contra mi cuerpo, vuelvo, vuelvo a temerle al mundo y me siento una extraña en él, otra vez. Necesito de nuevo la calma de antes al dormir, no pensar en mil cosas que aturullen mis sueños y los transformen en pesadillas; necesito estar tranquila cada vez que me enfrente a mi ex-mayor enemigo, para no volverlo contra mí, para no sucumbir a los encantos que me trae la muerte.
Necesito abrir esta nueva puerta, ahora sin máscaras y conmigo cargada de miedos por todo el cuerpo...aun pese a eso, necesito ya que la puerta se abra, para que todo esté tranquilo, para que todo vuelva a su sitio y yo vuelva a tener control sobre mis propios actos y valor para enfrentarme a mí misma cada vez que me pretenda hacer daño.

sábado, 20 de marzo de 2010

Se escapa; se va.

Veo como todo el fuego se está escapando de mis manos, a través de mis dedos y noto como muy lento me voy quedando fría y a punto de morir en cada instante... En un sólo segundo veo reflejado en el espejo la máscara de falsedad que me ha acompañado tantas veces y yo siempre he pensado que era real. Todo se vuelve contra mí en un sólo instante, lo veo todo borroso, creo que caigo al suelo así que me encierro tan fuerte como logre hacerlo; caigo al suelo y lloro, lloro tantas lágrimas como daño me han hecho. Soledad; sólo eso. Se me escapa todo, se me va todo, me quedo casi sola en el infierno más mortífero de mi vida... Se hace más y más grande ese nudo en el centro de mi corazón, en todo el epicentro de mi alma... ; y creo derrumbarme muy rápido...No sé por qué me arrancan toda mi fuerza y mi fuego en mi propia cara...Y ahora pretenden devolvermelo cuando ya no queda nada, cuando todo ha desaparecido y mi interior ha vuelto a ser la caja cerrada con llave que nada ya alberga dentro...

jueves, 11 de marzo de 2010

...Untitled

Salí a la calle, como cada día a jugar un rato y, de camino a casa, no he oído más que llantos y disparos; tengo miedo...pero cada día es igual, ya me acabo acostumbrando. Entro en casa y, es extraño, no oigo la voz de papá ni la risa de mamá ''Habrán salido'' es lo único que se me ocurre pensar. Subo las escaleras, busco una nota, cualquier trozo de papel mal escrito en el que ponga ''Pequeña, hemos salido, tienes la cena en la mesa; no vamos a tardar. Te queremos'', pero no, no existe ninguna nota y ninguna señal de ellos. Camino un poco más rápido abriéndo cada puerta de la casa y llamando en vano a mis padres. Vuelvo a la planta baja y entro en el salón; allí mismo se me congeló el corazón,se me bloqueó la sangre y mi respiración murió. Bloqueada,quieta, asustada,sola muy sola... y mi padre tendido en el suelo, desangrado, con los ojos vueltos y una mano en el pecho en aquel vano intento de parar la sangre que rebosa...No salen lágrimas, ni una sola, no hay fuerzas para eso, pero grito, tan fuerte como mi garganta me permite hacerlo y corro a la calle. Busco a mamá pero no hay rastro de ella, la calle está muerta como mi alma, vacía como mi vida...Corro en cualquier dirección y grito su nombre con la esperanza de oír un lejano ''Pequeña, aquí estoy'' pero nada oyen mis oídos excepto algún que otro disparo más, algún que otro retazo de vida arrancada...Ya casi anochece y mis rodillas tiemblan de puro miedo y cansancio. No sé que hacer, ni a dónde ir... me he perdido, no sé cuánto de lejos está allá donde vivo...Pero, escucho alguien, una voz, unos pasos ''¿Ma..mamá?'' Tengo miedo, quiero que sea ella, quiero que me protega en sus brazos y me diga que no nos matará ninguna guerra, quiero un beso suyo en mi mejilla, aunque sea el último, el último beso...
No quiero mirar atrás y saber que no son sus pasos los que oigo, no quiero ver a ningún señor apuntándome con ningún arma; pero me giro, casi temblando, casi llorando y aprieto los ojos muy fuerte antes de abrirlos...Es justo la imagen que no deseaba ver, justo uno de esos hombres con armas que no logro entender qué ganan llevándose a mi mamá y matándo a mi papá...''Señor...¿sabe usted donde está mi mamá?'' '' Si quieres te llevo con ella, pequeña'' No puedo creer que me dijera eso, él es un hombre bueno, va a llevarme con mamá...; pero, ¿por qué me apunta al pecho con esa pistola?¿ Por qué se ríe de esa forma tan tenebrosa? ¿ Porqué dispara? Tengo miedo, me duele el pecho, estoy muriendo...

domingo, 7 de marzo de 2010

With me.


Se tumbaron en la cama e, instantes después, la habitación ya era casi inexistente, sumida entera en la más preciosa oscuridad. El límite de los dedos de ella delimitaba, también, el cuerpo de él. Casi nada podía verse, tan sólo un par de sombras respirando del puro amor mutuo. Y era totalmente superfluo desprenderse de sus ropas o exceder a la pasión...; sólo bastaban las caricias y los besos para aclarar cuánto se aman. En silencio, los minutos pasaban tan rápido como el viento allá fuera; despacio, ella le acariciaba mientras sonreía, casi incoscientemente. Y el tiempo debió pararse entonces, para no tener que soltarse,para no parar de besarse, para no dejar de abrazarse, jamás...




¿Quieres volar? Te presto mi mano, te regalo mi tiempo y compartimos la eternidad.