lunes, 28 de marzo de 2011

Demasiado desfase para tan pocos orgasmos.

Hasta mañana, me dijo la nostalgia.

Persigo el rastro de tus huellas, el camino que no debo y con el que más sufro cuando llega. Arrastro tras mis pasos quizás todas mis palabras perdidas, todo lo que no quise y ahora tengo, todo lo que no tengo y siempre quise. Persigo, sin descanso, lo que no me dejaste tener; corro y busco algo que me sabe imposible de encontrar, algo que está dentro, muy dentro de mí. Quizás ya sea demasiado tarde para echar de menos lo que nunca tuve ni tendré, quizás ya no valga la pena sonreír sin de veras sentirlo, ni quererlo...
Sólo habrá una razón que me haga despertar cada día, sólo una que me de fuerzas para perseguirte. Una, solamente, para dejar en cualquier rincón que nadie conozca todas las cenizas que va dejando mi cuerpo mientras muere, despacio, y ya, sin miedos.

Demasiado desfase para tan pocos orgasmos, demasiadas cicatrices para no sufrir por sus heridas, demasiado tiempo, quizás, para tan poco espacio y tan temerosa velocidad.
Demasiadas pesadillas en un sólo sueño, o demasiados sueños para vivir esta pesadilla.

1 comentario:

  1. A veces es necesario aprender a soñar en un mundo de pesadillas, quedarse con la poca luz que brinde la oscuridad, o por qué no, quedarnos en esa oscuridad si así nos sentimos más cómodos en ella.
    Cada uno debe buscar lo que le valga en cada momento para sentirse mejor con uno mismo, es cierto que a veces somos un poco masocas y perseguimos cosas que por más que queramos...nos duelen. Pero sólo se vive una vez, o por lo menos que lleguemos a recordar... ¿que perdemos en intentar ser un poco más feliz?.

    ¡Un Beso!

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