sábado, 19 de noviembre de 2011

Cada vez más lento.


Dejar que todo fluya muy lento, que la lluvia nunca llegue al suelo, que el camino se haga eterno.
Que todo se mueva infinitamente despacio, que tus caricias en mi cuerpo nunca acaben, que la noche nunca llegue a amanecer.
Quiero pasar horas y horas buscando la infinidad en tus ojos, horas mirando tu cuerpo y horas alejándome cada vez más del suelo. No hace falta que diga que me pierdo observando cada gesto, cada movimiento que haces, cada palabra que dices; ni hace falta decir que el cielo se me queda muy abajo cuando me susurras cualquier estupidez en el oído y yo...suspiro.
Quiero que el tiempo se pare cuando me besas, que nunca acaben esos momentos, que sea todo tan lento...Que no hace falta decir que quiero despertar cada día rodeando tu cuerpo, desayunarme tus labios, muy despacio, cada amanecer... y sentirte tan dentro.
No hace falta decirte que eres el motivo de mi sonrisa, de mi brillo en los ojos, de mi ilusión, de mis ganas de seguir despertándome cada día y verlo todo un poco más diferente, menos gris, menos triste. No hace falta que te diga, porque ya lo sabes, que si te alejas todo pierde su sentido, que has convertido mi historia en un cuento infinito y que todos mis temores dejan de tener sentido cuando estás cerca y se desvanecen cuando me abrazas...Haces que todo parezca fácil con sólo sonreírme y que no necesite nada más que una mirada tuya para sentirme completa.


Que ya sabes de sobra...que mi tercer deseo es escaparme contigo, muy lejos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario