miércoles, 27 de enero de 2010

Exceso de locura.

Camino, casi sin fuerzas ni ganas; noto como la noche va pesando sobre mí, cada segundo un poco más. No tengo rumbo, no hoy... No tengo tiempo que perder, porque ya lo perdí todo, desperdicié cada segundo que el destino me regaló y ahora, ahora sólamente lo lamento en silencio.
Parece que nuevamente empezará a llover, qué más da si no llevo apenas abrigo que me resguarde de tanto frío, qué más dará si ya ni tengo cobijo donde refugiarme un poco de esta tormenta de emociones. Aveces, por no decir siempre, no entiendo a mi monstruo interno, el cree llevar el control y yo trato de suprimir su fuerza, sin conseguir nada.
Ya no encuentro los colores que pinten mis folios en blanco, apenas encuentro letras que se logren escribir solas en las páginas vacías de mi diario; no sé donde diablos perdí la cabeza que ya ni siquiera reconozco mi propio tacto y, menos aún, mi imagen reflejada en cualquier charco, de cualquier calle, de cualquier lugar...
He perdido tanto la cordura... que se me acaba el tiempo, sin apenas dar un par de pasos más...

2 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho tu blog, creo que describes muy bien pensamientos muy íntimos que pasan por nuestra cabeza. A veces, en medio de la locura, el camino nos llega por súbita inspiración. Hay que seguirlo.

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