¿Quieres jugar conmigo?
Vamos, te invito a jugar al cuarto oscuro, donde tus palabras se mezclan con la oscuridad de mis pupilas y se desdibujan entre mis labios sellados.
Ven a divertirte, que aquí nadie nos ve, que la sangre que se derrame, yo misma me encargaré de beber...
Entra, aquí no puedes ver nada, no harán falta nuestros ojos para sentirnos cerca, para acariciarnos cual fiera muerta de hambre y beber hasta que nuestra sed se calme o, almenos, logremos disimularla... Acabemos antes de que abra los ojos, antes de que toda esta fantasía quede en un simple sueño, antes de que mis ganas de ti se vuelvan más fieras y acabe haciendo una locura. Acabemos perdiéndonos el uno con el otro antes de que amanezca, de que abra mis ojos y todo desaparezca...
Y hasta que el destino quiera...
Lo que no te dije nunca
siempre será lo más importante.
Muchas veces aquello que más sentimos es lo que menos podemos llegar a decir, pudor quizás, vergüenza añadida, inseguridad o miedo. También he dicho desde hace un tiempo hasta ahora que prefiero que me demuestren las cosas antes de que me las digan... pero también es necesario a veces oir de labios de quien quieres ciertas cosas.
ResponderEliminarComo siempre, un texto muy bueno =P.
En el cuarto oscuro por cierto, también podeis jugar a que sois los unicos de un nuevo universo creado tan solo y para vosotros dos, sin nadie que os moleste en vuestro sueño-aventura.
Un Beso.
Hola holita, me presento, soy Niza (llamémosme así, por el momento) la cuestión es que acabo de abrir un blog y me gustaría que pasaras a leerlo y comentaras qué te parece (sí, incluso si te parece lo más horrible del mundo). http://deshaciendounatrenza.blogspot.com
ResponderEliminarPor cierto, añado también que fue una entrada muy intrigante y me dejó embelesada de principio a fin.
Ya me despido, que sigas escribiendo así, yo me pasaré a hacerte una visita de vez en cuando.
¡Un besote!
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